BENDÍCENOS
Señor Jesús,
bendice nuestros hogares:
que sean casa de oración,
de comunión,
de santidad
en estos tiempos de miedos
que nos encogen el ánimo.
Muchas veces no es fácil.
Señor Jesús, danos luz y valentía.
Señor Jesús,
cuida nuestras casas:
que vivamos en paz,
en alegría
y en profunda unidad y reconciliación
en estos tiempos tensos
que nos fragmentan y nos separan.
Muchas veces no es fácil.
Señor Jesús, danos fuerza y valentía.
Señor Jesús,
hazte presente en cada uno de nosotros:
que seamos apoyo,
compañía,
estímulo
para irradiar la presencia del Reino
en estos tiempos extraños que nos tocan vivir.
Muchas veces no es fácil.
Señor Jesús, danos inteligencia y valentía.
Señor Jesús,
te pedimos por todos nuestros parientes:
que crezcamos juntos
en la fe
la esperanza
y la caridad.
Muchas veces no es fácil.
Señor Jesús, danos paciencia y valentía.
Señor Jesús,
te pedimos por todos nuestros amigos:
que irradiemos
lo mejor de nuestros corazones
cada vez que nos encontremos.
Muchas veces no es fácil.
Señor Jesús, danos coraje y valentía.
Señor Jesús,
te pedimos por todas las personas
que sienten que la soledad
les abruma día a tras día.
Haznos instrumentos de la fraternidad
allí donde más falta hace.
Muchas veces no es fácil.
Señor Jesús, danos libertad y valentía.
Señor Jesús,
bendice a todas las familias del mundo,
en todas sus variedades,
en todas sus circunstancias,
en todos sus procesos,
en todos sus anhelos,
en todas sus fragilidades.
Señor Jesús,
bendice a todas las familias del mundo
porque cuando dos seres humanos dicen que se aman,
reflejan el amor sin límites
que tú, Señor, tienes por toda la humanidad.
Señor Jesús,
míranos,
mira a todos los seres humanos:
nos podemos llamar seres familiares.
Abre nuestras mentes y corazones
para cultivar,
ofrecer
y compartir lo mejor de nosotros,
lo mejor de Ti en nosotros,
lo mejor de la humanidad
gracias a Ti,
en Ti,
por Ti
amor sobre todo amor,
vínculo de los vínculos,
entrega de las entregas.
Amén.